En una carrera tan intensa como la de ayer en el Gran Premio de Holanda en la que hubo ¡más de 100 adelantamientos! es difícil quedarse con una sola imagen. Si tuviéramos que destacar alguna de las muchas que nos dejó la catedral posiblemente sería la del escalofriante toque entre Valentino Rossi y Jorge Lorenzo.
El choque pudo haber pasado desapercibido al mantenerse los dos pilotos en pista, pero la cara de susto de Rossi al explicar el momento a su equipo lo dijo todo.
Un inevitable choque en curva a 195 km/h